Camionero en ruta

Hoy desde Castillo Grupo os presentamos a Mario Vale un camionero gallego nacido en Boiro (A Coruña), y que reside en O Barco De Valdeorras (Orense). Al principio de su trayectoria profesional se dedicó a la informática con los primeros ordenadores que salieron al mercado, pero rápidamente se dió cuenta que era algo que no le atraía, por lo que se decidió a probar con uno de los camiones de su padre. Se echó a la aventura, y esta aventura dura ya hasta el día de hoy. Lo podéis conocer mejor visitando su propio blog donde cuenta sus aventuras al volante de un Volvo FH12 y diferentes noticias del sector.

Inicio de la jornada

“Después de realizar mi parada el día anterior en el aparcamiento del centro comercial Intermarché allá en un pueblo francés de la vertiente norte de los Pirineos, me dirigía descargar paredes de yeso de pladur en un almacén de construcción. Como la mayoría de las veces pasa, cuando no conoces el lugar y vas además justo de horas , esto te impide arriesgarte a llegar a tiempo. Además si no hay sitio para estacionar el tener que buscarlo en el primer aparcamiento que ves medianamente seguro, intentar aparcar donde no te puedan molestar y mover el camión destrozando el descanso registrado en el tacógrafo.

De tal manera que inicio mi jornada seleccionando en el menú del tacógrafo el país y esperando que salte el minuto en la pantalla, porque si no lo haces en estos primeros tacógrafos digitales, te cuenta en la suma final de las horas conducidas, como dos minutos porque cuenta también el minuto anterior que estabas en marcha. Por eso hay que esperar que cambie el minuto de la pantalla.

Fuente: http://goo.gl/nT5lGG

En resumen para no entreteneros más ,emprendo mi marcha en busca del almacén donde tengo que descargar, todo de momento sin complicaciones , apenas tengo que dar muchas vueltas, que es siempre el miedo que me da cuando llevas un bicho de 16.50m y no sabes dónde girar en caso de haberte pasado.

Deposito la mercancía y me voy a toda máquina porque mi jefe había cerrado un retorno en Irún para descargar en el mismo día en Valladolid. Mi esperanza era que después del trabajo, fueran suficientes las horas para llegar a casa. A estas alturas de semana y habiendo salido el domingo había consumido las dos jornadas que tenemos a la semana de 10h de conducción en el viaje de ida hacia Bélgica, por tanto solo me quedaban 9h para llegar a casa.”

Retorno fallido

“Como dice el dicho popular “todo mi gozo en un pozo”, aunque en los papeles de descarga la hora establecida indicaba las 18:30h, me presenté a las 18:00h. Me comentan que va ser difícil descargar ese día, teniéndome que quedarme a dormir allí. Dormir por decir algo, porque aunque llevo en el techo instalado el a/c autónomo, este no funciona y a esa hora de la tarde no hay persona humana que aguante en la cabina del camión, es un horno andante sobre ruedas, nunca mejor dicho.

Me decidí a buscar una sombra que aliviara mi sufrimiento, el sol en este comienzo de verano ya abrasaba el asfalto. Eran varios los compañeros que se encontraban en una situación similar a la mía, nos juntamos varios caminantes de carreteras, con lo que hasta el anochecer estuvimos debatiendo y arreglando el transporte de este país…”

Fin del día

“Al día siguiente se cumplieron mis expectativas y pude descargar, eso sí bastante tarde, llegando al final a casa un día después de lo programado. Amigos estas son las “cuentas del lechero” en este caso las del camionero, que le vamos hacer. Así acabó mi dura jornada al fin.

Esto es un día de mi vida en la carretera que como muchos compartimos como profesión, espero que os haya gustado. Además podéis visitar mi blog donde realizo publicaciones de actualidad sobre noticias y aventuras del sector.”