Desde Castillo Grupo hemos implementado un sistema de calidad propio que gestiona el estado de los carburantes en todos sus procesos logísticos de descarga, almacenamiento, manipulación y suministro, hasta su entrega al consumidor final con un único objetivo: proporcionar a nuestros clientes el mejor producto para su vehículo.
Mientras que los carburantes no aditivados son aquellos comercializados que siguen las especificaciones acorde a estándares Españoles. FÓRMULA MAX DIESEL asegura mejoras probadas y certificadas en eficiencia para los consumidores.
El combustible recién refinado está limpio. El problema sucede entre el tiempo en que el combustible deja la refinería y entra al deposito del vehículo. Debe manejarse cuidadosamente para evitar la posible contaminación que puede causar daños serios.
Por lo tanto, el objetivo prioritario de Castillo Grupo es garantizar la calidad de los carburantes asegurando su fiabilidad.
¿Qué hacemos?
La calidad no se controla, se produce. Producimos Calidad.
¿Por qué lo hacemos?
Para garantizar la calidad y seguridad de los productos, procesos y sistemas. Debido a que, el mejor carburante si se contamina no sirve para nada.
¿Cómo lo hacemos?
Certificando los procesos mediante análisis de muestras e inspecciones periódicas.
¿Dónde lo hacemos?
Tanto en el transporte, como el almacenamiento y el repostaje.
¿Cuándo lo hacemos?
Siguiendo un calendario de acciones verificado.
¿Quién lo hace?
Responsables cualificados internos y auditores externos.
¿Para qué lo hacemos?
Para que nuestros clientes nos reconozcan como marca de confianza y diferenciarnos en el mercado bajo un sello de calidad.
