A comienzos del 2015, la DGT implantó una nueva política aumentando los controles de velocidad tanto en particulares como en transportistas. El exceso de velocidad provoca accidentes y por eso este verano, además de diversos controles, se han habilitado más de 1.000 radares para evitar choques innecesarios y aportar la máxima seguridad en las carreteras.
Además de los radares tradicionales fijo y de tramo, se han colocado los innovadores radares Veloláser para que la DGT controle la velocidad en sus carreteras. Estos nuevos cinemómetros son fáciles de transportar y pueden instalarse sobre cualquier base. Madrid, León y Galicia son los lugares donde más se pueden localizar.
Limitadores de velocidad para transportistas
Las empresas de logística deben prestar especial atención a estos nuevos radares y sus transportistas deberán ajustar su velocidad a los límites permitidos para evitar sanciones. Estas multas variarán dependiendo de la vía por la que se circule y la velocidad máxima permitida en el tramo exacto donde se sobrepasó el límite permitido.
Además es necesario tener en cuenta que la Unión Europea declaró, de forma obligatoria, la instalación de limitadores de velocidad en todos aquellos vehículos que transporten mercancías, con un peso superior a 3.500 kg.
Tipos de radares
La DGT analiza de forma constante las zonas de concentración de más accidentes y este verano se han instalado 374 radares fijos, 62 de tramo, 557 móviles y 12 Pegasus. En total habrá 1.270 puntos de control repartidos por diferentes carreteras convencionales, autopistas y autovías.
En definitiva, la DGT trata de concienciar de la importancia de conducir dentro de los límites de velocidad obligatorios. A través de los diferentes controles de velocidad y colocación de radares de diferentes tipos en diferentes puntos de la geografía española, intentara disminuir el número de accidentes y ,sobre todo, de muertos en las carreteras españolas.